martes, 3 de febrero de 2009

El señor de las moscas

EL SEÑOR DE LAS MOSCAS


http://www.leergratis.com/clasicos/el-senor-de-las-moscas-william-golding.html ( AQUÍ PUEDES LEERLO GRATIS)
El Señor de las Moscas es uno de los libros que tratan la naturaleza del ser humano de la forma más pesimista que cabe imaginarse. Escrita en 1954 por el premio Nobel William Golding (1911-1993), parece una revisión de Leviatán, de Thomas Hobbes, donde se afirma que existe una constante e inherente “guerra de todos contra todos”.

En la II Guerra Mundial, un avión se estrella contra una isla paradisiaca. Este avión transportaba decenas de niños británicos de entre los seis y los once años, y tras el accidente, ningún adulto sobrevive, con lo que los niños han de buscarse la vida por sus propios medios, y establecer una sociedad provisional a la espera de un rescate por parte de “los mayores”. En principio, justo después del siniestro, Ralph, un joven atractivo y carismático, se hace con el control gracias a una caracola que utiliza para llamar a los demás. A él se le pega como una lapa Piggy, un chico rechoncho, de quien se burlan hasta la sociedad, y busca en Ralph protección y respeto. Otro chico, Jack, tras una discusión con Ralph, se impone y crea otro bando, libre de leyes y de formalidades y con conductas mucho más déspotas y anárquicas.
Lo más atractivo de El Señor de las Moscas es su profunda y minuciosa reflexión social, donde las buenas intenciones y las tensiones entre los niños, al principio suaves y llevaderas, se convierten en una lucha violenta y desgarradora entre dos bandos no muy bien diferenciados, con consecuencias increíblemente arrolladoras. La condición metafórica del libro deja en evidencia la idiosincrasia del ser humano de una forma dura, cruel y tajante. Que los niños sean los protagonistas del libro es un hecho que podría parecer infantiloide, pero nada más lejos de la realidad. El Señor de las Moscas es un brillante relato que incluye entre sus temas indispensables la necesidad de adaptarse ante circunstancias adversas, la violencia, el miedo en todas sus formas: a lo desconocido, a la incertidumbre, a los demás, y a la soledad.

Esta novela, a pesar de lo despiadado de su historia, esconde un derroche de imaginación y originalidad, una placentera colmación de inspiración, plagada de detalles curiosos en lo estético y en lo narrativo, con un estilo frío y elegante, y unos personajes alegóricos y memorables, que sufren una evolución apabullante.

Su carácter antibelicista le ha convertido en un libro de referencia en la literatura anglosajona hasta el punto de que es lectura obligada en muchos colegios de Gran Bretaña. También ha visto adaptaciones al cine en 1963 y 1990, la primera de ellas con aplauso de crítica y público unánimes. Su influencia ha sido amplia, con ejemplos como la serie Lost o la película La Selva Esmeralda.

El señor de las moscas
de Wiliam Golding
El señor de las moscas es una fábula sobre la condición humana. Un avión que huye de una explosión nuclear se estrella contra una isla dejando a un grupo de niños abandonados. A partir de ahí el autor reflexiona sobre cómo, sin la presencia de un adulto, serían capaces de sobrevivir. Con el trasfondo de las novelas de robinsones y, especialmente, de La isla del coral, Golding dibuja un escenario en que la agresividad aparece como un instinto primitivo que se desarrolla especialmente en las situaciones límites. La novela, escrita con un gran estilo y perfectamente trabada en su estructura y desarrollo puede considerarse una de las más geniales obras del siglo XX. Sobre un trasfondo de aventuras, en las que la lucha por la supervivencia coexiste con la esperanza de ser rescatados, Golding realiza una reflexión novelada sobre la política, la importancia de la civilización para el desarrollo de la persona, la necesidad de un adulto para el verdadero crecimiento, el origen de los mitos y la presencia del mal en el hombre, en la sociedad y en la cultura.
Esta novela, que puede leerse como un simple libro de aventuras admite, sin embargo multitud de registros. Así puede disfrutarla el joven que desea asomarse a libros de calidad y a la vez entretenidos, pero también el maestro que se plantea en qué consiste educar o aquel a quien le inquiete la pregunta por el hombre y la irrupción del mal en la historia.
La grandeza de la obra reside en que el autor ha sabido llevar las grandes preguntas a una historia de niños aparentemente intrascendente. En una supuesta situación de hecatombe mundial ¿un grupo de personas que quedaran totalmente aisladas serían capaces de conservar la dignidad? ¿Puede el hombre salir de una situación de degradación y salvajismo sin la ayuda de Alguien que venga de fuera? Estas y otras preguntas son las que se suscitan en este libro que, lejos de agotarse en una sola lectura, invita a volver sobre él una y otra vez. De la literatura posterior a la Segunda Guerra Mundial esta es una de las obras que más merece ser recordada. Su valía ha venido avalada por las numerosas ediciones que se han hecho de ella en todos los idiomas. No está de más señalar que el autor consigue centrar en dos personajes, de apenas 13 años, las mayores antítesis sobre la concepción de la civilización. Mientras uno se deja atraer por el corazón de las tinieblas e inicia una regresión que lo conduce al salvajismo, el otro no deja de recordar el lugar de dónde viene y mantiene la esperanza en un rescate cada vez más milagroso. Todo ello magníficamente relatado y recurriendo a símbolos e imágenes de una gran plasticidad. Golding consigue con pocas figuras un auténtico tratado sobre la condición humana y, todo ello, sin dejar de suministrarnos una muy entretenida novela de aventuras.
Wiliam Golding
Nació en Cornualles en 1911. Estudió Ciencias y Literatura inglesa en Oxford. Trabajó como actor, productor, profesor, marinero, músico y, finalmente, maestro de escuela.
En la Segunda Guerra Mundial, donde sirvió en la Marina hasta que se graduó como teniente al término de la misma, participó en varias acciones navales como el hundimiento del Bismarck o el desembarco de Normandía, hechos que influyeron notablemente en su obra.
A pesar de haber decidido ser escritor a los siete años, no publicó hasta 1934 una colección de poemas, pero su verdadero debut literario se produjo en 1954, cuando publicó El señor de las moscas. Desde entonces publicó siete novelas, una colección de relatos, varias obras de teatro, ensayos y artículos. En 1980 recibió el Booker Prize por su novela Ritos de paso, y en 1983 fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura. Murió en 1993
Tras la lectura del libro, se trataría d hacer la siguiente disertación:
¿Es el hombre un ser natural o, por el contrario, es a cultura la que lo convierte en lo que es?
Argumentar a partir de la novela o usar otros documentos similares.

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